Algunos estudios han sugerido que puede haber una relación entre el ciclismo y la disfunción eréctil (DE) en los hombres. Sin embargo, antes de entrar en pánico y vender su bicicleta, tenga en cuenta que, en este momento, la evidencia sobre el tema aún es limitada y contradictoria. La asociación potencial entre el ciclismo y la disfunción eréctil es probablemente más matizada de lo que cabría esperar. Además, puede haber formas en que los ciclistas puedan protegerse contra la disfunción eréctil.

¿Por qué el ciclismo podría aumentar el riesgo de disfunción eréctil de un hombre?

Aún no se ha confirmado la razón de un posible aumento del riesgo de disfunción eréctil debido al ciclismo, pero los expertos han propuesto algunas teorías. Una teoría es que montar en bicicleta (particularmente en largas distancias y/o largos períodos de tiempo) puede comprimir el nervio pudendo, que es el nervio responsable de enviar mensajes entre el cerebro y los genitales. La compresión de este nervio al sentarse en un asiento de bicicleta durante períodos prolongados puede interferir con la comunicación entre el cerebro y los genitales, lo que posiblemente provoque una disminución de la sensibilidad en los genitales y/o disfunción eréctil temporal.

Otra teoría es que la presión constante sobre el perineo (el área entre el ano y los genitales) causa una disminución del flujo de sangre al pene, lo que resulta en una disminución de la oxigenación del pene y potencialmente disfunción eréctil con el tiempo. Sin embargo, a pesar de la observación de cambios temporales en el flujo sanguíneo/oxigenación del pene en ciclistas, estos cambios no se han asociado con la presencia de disfunción eréctil.

¿El ciclismo representa una seria amenaza para la función eréctil?

Es natural preguntarse si es grave el riesgo de disfunción eréctil relacionado con el ciclismo. En este punto, los datos sobre el ciclismo y la disfunción eréctil provienen principalmente de estudios más pequeños, por lo que los estudios prospectivos a gran escala con grupos de control contribuirían en gran medida a iluminar el nivel de riesgo. Sin embargo, dados los hallazgos mixtos sobre el tema, muchos expertos creen que el riesgo de disfunción eréctil debido al ciclismo es menos significativo de lo que se creía originalmente.

Una revisión exhaustiva de la literatura reveló varios estudios pequeños que indicaron que montar en bicicleta no tiene ningún efecto sobre la función eréctil, un estudio que informó de un mayor riesgo de disfunción eréctil en ciclistas y un estudio que mostró menores probabilidades de disfunción eréctil en ciclistas. Es importante destacar que estas diferencias podrían deberse a variables de confusión como la intensidad y la frecuencia del ciclismo (es decir, ciclistas aficionados frente a ciclistas profesionales/extremos) y la edad y el estado de salud general de los participantes. La presencia de un traumatismo perineal (quizás causado por un accidente de bicicleta) también jugaría un papel importante en el posible desarrollo de la disfunción eréctil. Aun así, el ciclismo moderado parece presentar un riesgo menor para el desarrollo de la disfunción eréctil  que otros factores como el tabaquismo, la hipertensión y la edad.

¿Hay algo que pueda hacer para reducir el posible riesgo de disfunción eréctil relacionada con el ciclismo?

En general, montar en bicicleta es un ejercicio saludable para el corazón y de bajo impacto que es bueno para la salud física de una persona. Si todavía le preocupa la disfunción eréctil, puede considerar levantar el manillar o pasar más tiempo de pie mientras va en bicicleta, ya que al menos un estudio observó una asociación entre estos dos factores y menos entumecimiento/dolor genital.

El tipo de asiento de la bicicleta que utilice es otra consideración importante. Un estudio que midió el flujo sanguíneo del pene de 20 hombres jóvenes después de probar cuatro asientos de bicicleta diferentes encontró que cuando se trata de la oxigenación del pene durante el ciclismo, el diseño del asiento de la bicicleta es importante. De los cuatro asientos de bicicleta probados en el estudio, ((A) un asiento angosto muy acolchado, (B) un asiento angosto con un acolchado medio, (C) un asiento ancho de cuero sin acolchado y (D) un asiento ancho con un acolchado medio y sin silla de montar), los asientos A y B mostraron peores resultados que los asientos C y D. Este hallazgo llevó a los investigadores a concluir que los asientos más anchos son mejores que el mayor acolchado para permitir la oxigenación saludable del pene. El asiento D tuvo mejores resultados en términos de mantener un buen flujo de sangre en el pene, lo que sugiere que las sillas de montar que eviten la compresión perineal son los mejores.

Finalmente, es importante que los ciclistas que experimentan entumecimiento u hormigueo en el pene interrumpan temporalmente el ciclismo hasta que mejoren sus síntomas. Si puede, pídale a un profesional que evalúe el asiento de su bicicleta y la posición de conducción para ayudar a identificar qué puede estar causando el problema.